La climatización industrial es una ciencia por sí sola. Lo decimos por su tamaño y por la cantidad de variables implicadas en su implementación. La climatización de grandes espacios siempre será un reto y por ello te queremos presentar los 5 sistemas de climatización industrial más comunes.
El uso de galpones es de uso corriente para ampliar el espacio útil de la empresa, ya sea para su propia producción o para almacenamiento. Pero los galpones tienen un problema, y es que reciben mucha energía solar, produciendo mucho calor en su interior.
Para resolver esto, existen muchos sistemas climatizadores, adaptados a diferentes tipos de situaciones, con diferentes características, tamaños, y hasta tecnología aplicada.
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Sistemas de Climatización Industrial Comunes
Utilizando el equipo adecuado, es posible reducir la temperatura interior del galpón, aumentando la comodidad de quienes lo ocupan y mejorando el confort para un mejor trabajo.
Como cada proyecto tiene sus necesidades especiales y únicas, es necesario que conozcas las distintas opciones disponibles en el mercado. A continuación te presentamos los sistemas de climatización industrial más comunes.
1. Ventiladores de alta potencia
Los ventiladores industriales funcionan igual que los ventiladores que se utilizan en el hogar, tienen el mismo principio. A través de hélices, hay una intensa circulación de aire, lo que hace que la sensación térmica sea un poco menor.
El principal resultado es que el aire no se queda quieto y no genera islas de calor en determinados puntos. Con esto, hay un mayor confort térmico y, principalmente, una mejor uniformidad en la temperatura.
El gradiente de calor, por lo tanto, se distribuye de manera más uniforme, lo que hace que el ambiente sea agradable.
Al ser de alta potencia, mueve volúmenes de aire mayores, lo que a su vez, es muy conveniente para espacios medianos y grandes, pero no para espacios pequeños. Además, está el hecho de que el ventilador por sí solo, no agrega ni quita calidad al aire, solo lo mueve.
Significa esto que, los ventiladores de alta potencia son ideales para aplicaciones industriales que no requieran un exigente control de la calidad del aire.
Los ventiladores industriales son una opción muy económica, y por ello lo podrás ver en galpones de tamaño medio que no necesiten bajar tanto la temperatura, y que la calidad del aire no influya en el producto final.
Entre sus desventajas, podemos destacar el hecho de que un ventilador industrial realmente no baja considerablemente la temperatura, solo reduce la sensación de calor. Si necesitas un espacio con una temperatura menor a la externa, esta no es una opción para ti.
2. Aires acondicionados industriales
Los acondicionadores de aire industriales trabajan con el mismo principio de cualquier equipo de aire acondicionado residencial. En un circuito se hace circular un refrigerante por varias etapas, cambiando la presión y temperatura del fluido. Este cambio de temperatura se aprovecha para enfriar ambientes.
Por supuesto, existen varios tipos de aires acondicionados industriales en el mercado, que difieren en funcionamiento, aunque manteniendo el mismo principio.
Este equipo es el que permite uno de los mayores sistemas de refrigeración, asegurando una caída brusca de temperatura. Como resultado, es una opción perfecta para lugares muy calurosos, o donde los niveles de calor deben mantenerse muy bajos.
El resultado es un entorno distribuido uniformemente que se puede regular tanto en calidad como en temperatura, humedad, etc. Los aires acondicionados industriales son una gran opción para ambientes comerciales en general, sean tiendas pequeñas o grandes galpones.
Hemos visto muchos de ellos para controlar la climatización de centros comerciales, salones de eventos, clubes, etc. El problema con el uso de este equipo es que sin el correcto mantenimiento de los filtros, se pueden liberar impurezas al ambiente que se está climatizando.
Además, el uso de energía eléctrica es otra barrera para el uso adecuado de este equipo, ya que el consumo es alto.
3. Climatizadores evaporativos
En una posición intermedia entre el ventilador y el aire acondicionado, se encuentran los acondicionadores de aire por evaporación. Como su nombre lo indica, utilizan un sistema a base de agua, aprovechando la evaporación.
En estos equipos, el aire caliente entra en contacto con un intercambiador de calor, que tiene agua fría. Con la pérdida de temperatura, el aire se enfría y se vuelve pesado, siendo ventilado al ambiente con la ayuda de ventiladores.
Como el aire caliente entra constantemente en este equipo, hay una renovación continua de aire en el ambiente climatizado. La caída de temperatura puede oscilar entre 10 y 12 °C, y esto debes tenerlo en cuenta. Con esto, es posible lograr el confort térmico sin dificultades en muchos proyectos.
Más que eso, otro beneficio de este equipo es que usa mucho menos electricidad que el aire acondicionado y también ayuda con la humidificación. Por lo tanto, existen mejores condiciones para el medio ambiente.
La desventaja es que, en ciertos casos, no es tan potente. Cuando la caída de temperatura debe ser muy brusca, este equipo no es eficiente por sí solo, y debe asociarse con otros equipos para aumentar la eficiencia del sistema.
4. Escapes de viento. Extractores eólicos
Los escapes de viento son soluciones prácticas y sostenibles que se instalan en la región del techo del cobertizo.
Son también conocidos como «Extractores eólicos«, son fabricados en aluminio, de forma circular y con aletas, ayudan a eliminar el calor del interior de un ambiente y renuevan el aire que está contenido en él.
La operación se realiza mediante el movimiento. Cuando hay vientos o incluso brisas leves, el escape de viento gira, lo que crea una diferencia de presión interna. De esta forma se puede eliminar el aire caliente que queda debajo, acumulado en el interior del techo.
Incluso sin vientos, hay un rendimiento eficaz. Como el aire caliente es ligero, se eleva y ejerce una gran presión sobre los extractores. Con el movimiento, este exceso de temperatura se libera.
No requieren energía eléctrica y, por lo tanto, ofrecen una solución ecológica muy rentable y funcional. Además, se pueden disponer en todo el cobertizo, lo que garantiza un excelente control del clima.
Algunos de estos escapes de viento, tienen entradas de luz. Durante el día, ayudan a iluminar el lugar con mucha luz, lo que reduce el consumo eléctrico.
Sin embargo, esta opción no es capaz de generar una reducción de temperatura tan rápida, al menos no en lugares donde no hay mucho viento. Lo ideal, por tanto, es asociar este equipo con otros equipos de apoyo, como un ventilador o un condensador.
5. Paneles Sándwich para techos
También llamados paneles termoacústicos, las baldosas sándwich son elementos que ayudan a garantizar que el lugar no se caliente tanto por dentro. Es decir, no actúan sobre el enfriamiento, sino directamente sobre la causa del problema, que es el calentamiento del galpón.
Están compuestos por dos láminas de metal y en el medio hay un material aislante, algún tipo de polímero. Gracias a ello, el intercambio de calor se produce de forma controlada, convirtiendo el cobertizo en una especie de termo.
Por lo tanto, la temperatura ambiente se mantiene o experimenta pocos aumentos. Además de reducir la necesidad de equipos de refrigeración, también ayuda a proteger contra el ruido. En un galpón ubicado en una zona de mucho movimiento, su uso también ayuda a garantizar la salubridad del espacio.
Sin embargo, su coste puede ser un poco más elevado y es necesario realizar un proyecto a medida para que exista eficiencia energética y acústica de la forma deseada.
¿Cuál Es El Mejor Climatizador Industrial?
Todos los climatizadores tienen características aprovechables y ventajas sobre otros, dependiendo de lo que realmente necesites para tu empresa. Incluso puedes usar combinaciones de varios climatizadores para mejorar la eficiencia y aumentar el confort dentro del galpón.
Todo depende de tus necesidades y de tu bolsillo.
